De Bagan a Mandalay viajamos en un bus de día, ha salido a las 7 de la mañana y no hace más que parar a recoger a gente…, pero si ya no cabe ni un alma?? En Myanmar utilizan el pasillo como 5º fila de asientos, ya sea poniendo unas pequeñas sillas de plástico o como en éste caso, viene de serie unos asientos abatibles para que al desplegarlos sean un 5º asiento. Increíble lo que se va en este país.
A parte los asientos están más juntos y a penas tenemos mucho sitio para las piernas, así que tras 8 horas de viaje, llegamos a Mandalay a las 15h y bastante cansados.
Otra vez al bajar nos abordan los taxistas…, «Where are you go?» vaya frase, comenzamos a estar algo cansados de ella. Se nota que según vas subiendo al norte del país es todo más turístico y comienzan a ser más pesados. La idea es ir al ET Hotel a probar suerte, ya que allí se alojan nuestros amigos catalanes. Los taxitas nos piden por el viaje hasta allí 7.000Kyats, están locos!!! Nosotros les decimos que sólo estamos dispuestos a pagar 5.000Kyats. Se llevan las manos a la cabeza, jejejeje. Nos lo dejan por 6.000 y como somos así de cabezotas, seguimos con nuestros 5.000Kyats. Como no hay trato nos vamos a buscar a otro lado. De repente viene un taxista corriendo y acepta los 5.000Kyats.
Llegamos al ET Hotel y tienen sitio, así que cogemos la habitación de 20$ con baño privado (sin aire acondicionado). En general el hotel tiene muy buena pinta.
Como es costumbre ya, una ducha, comida de Myanmar (arroz blanco con carne y verdura) en un puesto de la calle y nos vamos a echar una siesta.
Me despierto y abro un poco el ojo viendo que ya ha anochecido. Pienso que serán sobre las 19h y que hay que cenar, miro la hora y….. SON LAS 12 DE LA NOCHE!!!!! Vaya dormida que nos hemos pegado, y mientras yo sin enterarme de que a Ania le ha sentado mal la comida y ha ido al baño varias veces a vomitar.
Como ya no podemos ir a cenar, decidimos tomar el día de relax para recuperar fuerzas y dormir hasta la hora del desayuno. Pero antes de eso me levanto y voy a la zona Wifi para conectarme con Air Asia y comprar los billetes de avión que nos lleven Mandalay-Bangkok.
DIA 2 (Mingun y Colina de Mandalay)
El día de hoy comienza cogiendo un barco (5.000Kyats/persona) que nos lleva hasta Mingun. Sólo hay un barco de ida que sale a las 9 de la mañana y otro de vuelta que sale de Mingun a las 13h.
Cuando llegamos, decidimos dar primero una vuelta por el pueblo (según bajas del barco, en vez de ir de frente por donde va toda la gente, vamos hacia la izquierda). Llegamos hasta la parte trasera de la Mingun Paya.
Damos una vuelta alrededor hasta llegar a la parte delantera, es aquí dónde un hombre nos dice que tenemos que pagar la entrada (3.000Kyats). Tras intentar decirle que no queremos entrar en la Paya para no tener que pagar, nos exige que paguemos para ver el resto del conjunto arqueológico, o que si no, nos vayamos al barco. Así que decidimos irnos al barco.
De camino nos paramos a ver la Settawya Paya (templo que alberga la «huella» de Buda) y la Pondaw Paya («maqueta» dónde se vé el aspecto final que hubiese tenido Mingun Paya). A nosotros Mingun no nos ha gustado nada. Las cuatro cosas que hay para visitar se ven en un santiamén y quizá lo único que merece la pena de todo el conjunto (por comentarios que hemos oído) es la Hsinbyme Paya. Si no pasáis por delante de la entrada principal de la Mingun Paya es muy posible que podáis ver todo el conjunto sin tener que pagar nada.
De vuelta en Mandalay decidimos ir andando hasta el hotel (son alrededor de 2 km, pero es todo muy llano). Merece la pena recorrer la calle principal y encontrarte con el parking más grande de motos y bicis que hemos visto nunca. Es un paseo agradable, aunque eso sí, lleno de humo de tubos de escape.
Miramos varias tiendas de alquiler de motos que hay en la calle de nuestro hotel. Andan todas parecido, entre 10.000 y 13.000 kyats (hay que asegurarse de si te la dan con el depósito lleno o vacío para poder regatear el precio). La idea es alquilar mañana una para visitar Sagaing, Inwa y Amarapura.
Miramos en la Loney un sitio para comer, algo que sea diferente a los noodles y arroz birmano. Encontramos cerca del hotel un restaurante, el V Café – Skybar, en el que dan comida más occidental. Comimos una hamburguesa con patatas fritas (para quitar un poco el mono, jijiji) y un plato de Noodles. Estaba todo muy rico y por poco dinero (la hamburguesa cuesta 1.800Kyats).
Por la tarde vamos a la Colina de Mandalay uno de los lugares que hay que visitar. Regateamos un taxi a la puerta del hotel que nos costó 3.000Kyats. Cuando llegamos allí, un chico nos intenta convencer de que cogiéramos un taxi para subir hasta la cima, diciendo que está a 45 min. Le decimos que no y comenzamos a subir escaleras. En 30 min estábamos arriba, eso sí, sudando por las 1729 escaleras que hemos tenido que subir, y encima DESCALZOS!!!
Las vistas no son gran cosa, lo único que se puede apreciar son los campos de golf y parte del palacio (que no se ve entero porque los árboles lo impiden). Cobran 300 kyats por hacer fotos.
Más que las vistas, lo interesante de esta ascensión es ver como los vendedores hacen su vida a los laterales de las escaleras.
A la vuelta cogemos dos motos por el mismo precio que nos cuesta el taxi (3000 kyats por las dos motos).
Quedamos con nuestros amigos Luis y Pili para cenar algo, y como querían comer algo más occidental, les llevamos al mismo restaurante de la mañana para que prueben las hamburguesas estilo Myanmar. Tras la cena vamos a ver un concierto en una de las calles de Myanmar y es allí dónde nos despedimos de nuestros amigos!!!